domingo, 29 de julio de 2012

Nebuxys / Cyber fecundation



Esta banda quiteña, a partir de la sugestiva portada de su álbum Cyber fecundation (uno que nos habla de aquella fecundación arcana, acelerada e imponente que es una acertada metáfora de su música) presenta un trabajo de “cybercore” (como lo identifican sus integrantes) con diez temas arriesgados en sus planteamientos estéticos.

Si bien es cierto hay mucho del hardcore tradicional como base, la implementación de los recursos electrónicos dota de elementos desencajables, que resulta extraño dentro de un contexto y medio condicionado a una temática musical definida. Quizás el punto en contra sea la linealidad de su vocalista: quien recorre todos los temas dentro de una misma estructura.

La fecundación cibernética ha empezado, ahora dependerá del valor que los metaleros y el tiempo le otorguen tanto a la banda como a este álbum.        

Año: 2012. Producción: Ministerio de Cultura de Ecuador y Corporación rockero cultural Al Sur del Cielo. 



Resistencia / Sin Tregua


¿Qué se puede esperar de una agrupación que ha sabido mantenerse, musical e ideológicamente, dentro del movimiento metalero nacional? Mucho, por eso Sin Tregua, encuentra un merecido lugar dentro de la discografía de esta banda capitalina. Intensidad, experiencia y letras que hablan de una realidad social con problemas cada vez más renovados.

El álbum inicia con una envolvente y significativa Círculos de acero, toda una apertura emblemática para el metal que hacen y representan. De ahí los temas van hilvanándose dentro de una postura contestataria, directo contra aquel sistema decadente, contra muchos de sus actores sociales y ante esa problemática globalizada: guerras, injusticias sociales, migración y pobreza, así encuentran temas como Hipocresía, El gran mercado del hombre, Llegar. Como toda banda heavy comprometida con el ser metalero no dejan de lado la reafirmación de su postura, de ahí canciones como Sin tregua y el bonus track Estirpe metalera. Estar atentos con aquella emotiva Heridas de amor.

Caso aparte es el tema Balas perdidas, que recoge aquel confuso, fatídico y vergonzante hecho reconocido como el 11S. De ahí que se hable de Resistencia como una banda abiertamente política (y disculpas por la redundancia, puesto que toda banda lo es) dando a conocer una postura clara y directa.

Sin tregua es un trabajo de múltiples matices. Sus ocho registros nos hablan de un mundo, y por antonomasia de un Ecuador, siempre rico en sus historias marginales y también de aquellas que están ahí: frente a todos, pero que no logran verse inmediatamente. Salve el heavy metal ecuatoriano.  
Año: 2012. Producción: Ministerio de Cultura de Ecuador y Corporación rockero cultural Al Sur del Cielo.


miércoles, 4 de julio de 2012

Almetal / Headbanger


No será el título más original de la historia del metal nacional, pero Almetal, en este su reciente álbum ataca con furia, con una energía desbordante y enaltecedora del ser metalero, de su condición rebelde, de su estatus dentro de una sociedad caótica, en espera de gritos resonantes.

Headbanger es un trabajo para cabecear, con temas que no desperdician riffs menos palabras, un modelo de economía musical y lenguaje. Un modelo de lo que el metalero contestatario (no el de las piedras e insultos) puede lograr en pro de una estética definida. 

Fosa común, La caja ronca, En tu cara, Headbanger, Actitud, Trabajo sucio, Renunciar al dolor y Hay que silenciar son los temas que aparecen en esta obra. Sí, cada nuevo aporte musical de las bandas del país lo es. Más cuando las bandas presentan esa actitud de ser como son, sin falsas posturas ni discursos.   

Año: 2012. Producción: Ministerio de Cultura de Ecuador y Corporación rockero cultural Al Sur del Cielo.


martes, 3 de julio de 2012

Corazón de metal



Corazón de metal, banda ecuatoriana, no ha encontrado mejor tributo a sí mismo que titular a su álbum con el mismo nombre. A esa figura motriz y vital que mueve un cuerpo, en este caso uno identificado como heavy metal. Un cuerpo fiel a su discurso, a una ideología que aboga por una libertad y exterminio de prejuicios. Un cuerpo incólume que ataca y evidencia su naturaleza rebelde. Un cuerpo que se enaltece de ser como es: cuerpo heavy, cuerpo comprometido, cuerpo protesta.

Ocho temas componen este trabajo. Ocho temas que mantienen una línea heavy que no busca apartarse de sí misma, que no explora más allá de su propia condición ya estructurada, que se aferra a su naturaleza sin pretensión alguna. Para muchos puristas del género puede que esto sea esencial, que se mantenga aquella fidelidad intocable, pero el reto, el verdadero objetivo, siempre será romper cuanta estructura represente una atadura.   

Corazón de metal podrá no ser la banda más representativa del género en Ecuador, pero justamente este trabajo tiene el elemento base de toda banda: corazón. Por ello no quedan al margen estos temas que representan una voz, una que se haya desde los bordes sociales reclamando un debido posicionamiento. Una voz que puede llegar más allá de sus expectativas. Una voz con causa. Y esa es la partida más leal que pueda existir.

Año: 2012. Producción: Ministerio de Cultura de Ecuador y Corporación rockero cultural Al Sur del Cielo.

domingo, 1 de julio de 2012

Southern Cross / Sin retorno



Hay un retorno en este Sin retorno (Independiente, 2011) y es ese volver una y otra vez a los trece temas que contiene. A ese ciclo acelerado que representa el power metal que interpretan, a sus quiméricos anhelos, a sus letras ancladas en historias alucinadas, que habitan un campo donde la valentía, el amor y el honor conforman un cuerpo enunciativo preciso (sobre todo si se tiene como antecedente el género).

Tras el tema introductorio e instrumental, la canción que da nombre al álbum abre con garra y decisión a todo un trabajo rico en pasajes musicales, estribillos planeados al detalle (lo que ya dice bastante del compromiso compositivo de la banda) y una conjugación acertada en el orden de los temas. No es improvisado que primero se eleve al oyente con las canciones más desenfrenadas, luego se los apacigüe con baladas y finalmente se retorne a la partida.

Así esta banda ecuatoriana (quiteña) ha emprendido un viaje que no tendrá retorno al silencio, porque sus temas, aquel concepto totalizador que aparece y transita en el álbum, necesariamente debe reafirmarse (sobre todo desde los temas insignes: Sin Retorno e Infinito) dentro de un movimiento metalero globalizado (y ante esta realidad) ausente de asombro y ávido de nuevas experiencias musicales que no necesariamente encuentra en las bandas nacionales. Todo un reto para esta y el resto de bandas del país.