domingo, 11 de mayo de 2014

Hell Injection # 5




Resistencia, de eso se trata el estar al frente (y sobre todo detrás) de un medio de comunicación. Eso ha pasado con varias revistas que siguen dando lucha para no desaparecer en Ecuador, continuando en su propósito de sostener un discurso donde el apoyo incondicional a las bandas y al metal sea inclaudicable.

Eso encuentro en Hell Injection y su reciente número 5 (abril 2014), un fanzine que cada vez me gusta más, un fanzine que ha sido heredero de una escuela donde es un privilegio poseer uno de sus ejemplares (por el tiraje limitado). Y sobre todo por no caer en la ridiculez de catalogarse  a sí mismo como un medio de comunicación de “culto” (encasillamiento tan venido a menos y desprestigiado en la actualidad).  





Entre las treinta y ocho páginas con la que cuenta esta edición me quedo solo con las que, desde mi apreciación, logran sostener y justificar este número: las entrevistas a Nebiros (algunas ideas y no tanto sus prejuicios), Infernal, Agonía y Lujuria. ¿Por qué? Por estas perlas:
“(…) tocar mal no es underground” Nebiros (Dominus).
“(…) muchos nos preocupamos en imitar, en copiar y cabe la pregunta, cuándo estos tipos van a ser lo que son y no la imagen de otros” Infernal (Rubén Restrepo).
“Cuando una banda es mala musicalmente, tapa su mediocridad diciendo que son de culto por su gran ideología, cuando ambas cosas van de la mano, y los metaleros que saben apreciar el verdadero metal de calidad jamás van a tomarlos en serio” Agonía (Baldemar Álava).
“Nunca quisimos vivir de la música por una razón, si vives de la música tendrás que hacer lo que sea necesario para seguir viviendo cada día (…)” Oscar Sancho (Lujuria).

Esta edición se complemente con algunas notas informativas, biografías y el anexo de un afiche. Además con la incorporación del segmento de literatura, donde constan poemas y relatos.