Resistencia,
si se debe clasificar a la revista Darkness de alguna manera, nada mejor que
este calificativo, puesto que eso es lo que refleja con este reciente número
28. Una publicación que se resiste a desaparecer y engrosar la lista de los
muchos medios impresos que dejaron de circular por distintos factores.
Este
número está dedicado al metal ecuatoriano, a las bandas cuyas recientes
producciones repercuten tanto en el contexto local como en el internacional. Bandas
con trayectoria y también agrupaciones recientes. Bandas de distintos géneros. Una
radiografía del metal tricolor en sus más variadas propuestas.
Participan
bandas como Total Death (a quien está dedicada la portada), Basca, Hemisphery,
Delicado sonido del trueno, Malak, Habamal, Tribus, Decapitados, Colapso, 333,
Soul Steel, Madbrain, Profecía (un diálogo ameno), Muerte súbita, Gastrorrexis
(entrevista necesaria de leer), Disphexia, Sabra’s cult, Devasted (un guiño al
complicado mundo de los organizadores de eventos) y Epidemia (un modelo ideal
para un buen ritmo de entrevista). Complementan esta edición el editorial (que
tiene más de justificativo de la edición que un planteamiento en sí del medio)
el segmento noticias y reseñas.
La
revista no ha bajado su nivel de calidad, en cuanto a la presentación y diseño,
continúa el mismo estilo ya empoderado desde números anteriores. Además, incluye
como anexo un poster en conmemoración por los 25 años de la banda death metal
Ente, y también ofrece la posibilidad (para los interesados) en adquirir la
revista junto con un cd y dvd donde participan varias de las bandas
entrevistadas.
Periodísticamente
pudo ser mejor, incursionar no solo en entrevistas, sino en algún análisis en
torno a las muchas problemáticas y debates del metal ecuatoriano. Reportajes,
crónicas, columnas…existen varias posibilidades para que un medio salga de su
zona de confort.
Sin
embargo, y este es el mérito de la revista, la continuidad significa que aún
hay lectores de medios físicos, que existe mercado para los medios impresos,
que la apuesta sigue porque hay quien consume productos comunicacionales. Estar contracorriente
es creer en proyectos, y Darkness es un proyecto que va contra una marea de
consumidores digitales. Bien por su editor y su apuesta, los lectores
tradicionales lo apoyamos.
Somos
rock ekuador (2016) de Fredi Landázury, es un libro que recopila fotografías
cuyo objetivo es el rock, metal y sus protagonistas: público, bandas y actores
relacionados.
A
decir de su autor, “Esta selección de fotografías no pretende ser una muestra
de arte ni de técnica. Es únicamente una colección de instantes que intentan
plasmar y trasmitir algo más grande…”. Y eso puede ser la energía que desbordan
muchas de las imágenes: momentos irrepetibles de la historia del rock quiteño.
Porque
el libro tiene como espacio geográfico de retrato a los rockeros y metaleros
quiteños, así las imágenes dan cuenta de registros suscitados en conciertos
capitalinos como el concierto anual de la Villa Flora, la Semana del rock,
Quito Fest, entre otros.
Vocalista de Basca.
Pero
también es una obra que confirma la presencia de bandas, tanto locales como
visitantes, que han participado en estos espacios; del público eufórico y
latente en su rol motivador de las agrupaciones; de la variedad de géneros
rockeros y metaleros que convergen en una ciudad. Un libro para mirar al rock y
metal quiteño desde un lente.
Puede
que algunas de las fotografías se tornen repetitivas, que no comuniquen nada
relevante, pero esa no es la esencia de este trabajo. Porque su objetivo, y así
lo ha entendido este lector-espectador, es dar cuenta de un movimiento, de su palpitar,
de su ruido, de su grito esperpéntico que recorre cada retrato.
Si
se encuentran el libro, en conciertos o librerías, asuman el reto: identifiquen
a las bandas costeñas y serranas, al público, y a los personajes que pululan en
cada concierto.
TOTAL DEATH: Ider Farfán (guitarrista y vocalista) Carlos Moreno (bajista) Luis Fernando Orquera (guitarrista y voces) Danny Molina (baterista).
TotalDeath es una de las bandas más importantes del metal ecuatoriano. Es una de las
pioneras en lo que se llamó metal emocional. Se trata de una banda de death
doom metal, con más de 20 años de trayectoria y reconocimiento tanto nacional
como internacional.
Ha
publicado los trabajos Bajo el mismo extraño cielo (demo, 1996) Silencio
de soledad (ep, 1996) Lágrimas de ensueño (Metal Psycho, 1999) El
rostro que llevamos dentro (Subterra Records, 2001) Desolatte
recollections (American Line, 2006) y Somatic (American Line, 2010).
Su
más reciente trabajo se titula Inmerso en la sangre (American Line, 2015),
una obra que ha servido de excusa para contactar a su baterista, Danny Molina,
y dialogar extendidamente sobre este nuevo álbum e interiorizar en su
composición y letras.
Que
el metal de muerte invada a cada uno de los invocados a este ritual.
Portada del álbum Inmerso en la sangre.
Saludos Danny, ¿cómo le va a la banda por estos
días?
Pues ahí vamos muy bien, con varios proyectos encima, hace poco lanzamos
EL MENOR DE LOS MALES, un Split flexi 7” con nuestros hermanos LASEN, y tocamos
con el experimento TOTAL DEATH & IBO KUSH, una fusión con el legendario
cantante quiteño tocando canciones de sus discos y él cantando canciones
nuestras, estuvo muy disruptivo, no apto para gente cerrada.
Inmerso en la sangre es un trabajo con el que, desde mi lectura, han
regresado a la emotividad de álbumes como Lágrimas
de ensueño y El rostro que llevamos
dentro ¿Cuánto les tomó componer, corregir y alistar esta nueva obra?
Muchas gracias por las palabras, y sí tratamos de regresar a las
melodías de antes, pero con un sonido totalmente moderno, por eso fuimos a México
a grabarlo y enviamos a Suecia el trabajo para ser masterizado, exactamente nos
tomó un año desarrollar el álbum, y cerca de seis meses más en hacer arreglos
con los nuevos integrantes de la banda (Orquera y Moreno), estamos muy
satisfechos con el resultado.
A diferencia de sus dos álbumes anteriores: Desolate recolletions y Somatic, cantados en inglés y más death,
no se logró una promoción tan fuerte como ocurre con Inmerso en la sangre ¿a qué se debe esto?
Es cierto, con la salida de Rubén Barros de la banda, que era la
persona que se encargaba del booking, relaciones públicas y promoción de la
banda, retomamos el control de esta parte, Ider y yo. No hacemos booking, ni
relaciones públicas, pero sí nos encargamos de darle una estrategia de
comunicación correcta al material y hacer que la gente sepa qué es lo que sucede
con la banda y el nuevo material, esto es algo que no pasaba antes, porque ese
era un trabajo exclusivo de Barros y nosotros nos dedicábamos exclusivamente a
hacer música, Hoy en día le hacemos a todo.
¿Esto, respecto a la promoción, tiene que ver con la
publicación de varios formatos de la obra, desde el 7 ep Olvida, hasta el digipack?
Pues queríamos que este disco sea inolvidable, queríamos lanzarlo con
un single pero hacerlo de una manera internacional, entonces dijimos hagámoslo
con un 7” especial, que presente el álbum y lo hicimos. Es una edición muy
bella, de lujo, varios colores, una presentación de primera, se acabó y nos dio
el empujón que necesitábamos para presentar el álbum en varias presentaciones.
Lanzamos una versión digipack de seis paneles fabricada en NY/USA, que
se acabó en el 2014 mismo, American Line lanzó la versión Cd Jewel, con un
booklet de 24 páginas, sleevecase/stickers, lanzamos la versión Picture Disc
12” vinyl con tracks especiales (es la primera vez que una banda nacional lanza
un picturedisc), también existe un single en un Split 7” Flexi Vinyl (5
colores) compartido con nuestros hermanos LASEN, que se llama “El menor de los
males”, que tiene una canción que no está en otras ediciones y la última
versión es un libro con cuentos de varios autores nacionales que han reinterpretado
las canciones y han escrito historias, se llama Cicatrices del demonio y se lanzará muy pronto.
Portada del ep Olvida.
¿Cuán necesario es que una banda, tras la
publicación de un nuevo álbum, le apueste a la promoción no solo de la música,
sino de mercadería (camisetas, parches, cervezas, etc.) vinculada a la obra?
¿Cómo les ha ido a ustedes?
Sabes que nunca hemos pensando en hacer cosas desde un punto
marketinero, simplemente queremos hacer algo especial para la gente que nos
sigue, no hacemos miles de tirajes de nuestros CDS o merchandising.
Tratamos de hacer cosas especiales, tal es el caso de la cerveza, la
lanzamos por los 20 años de la banda, fuimos los primeros en hacerlo en esta
región de Latinoamérica y en una presentación de lujo, hicimos apenas un batch
de 400 cervezas que se acabaron en pocos meses.
O la merch, camisetas o parches, es material exclusivo lanzado en
tirajes de 50 piezas de cada diseño, justamente para seguidores de la banda, no
nos interesa generar más fans, que es el verdadero objetivo del marketing.
No nos ha ido bien si pensamos en ventas o en ganar plata, porque
siempre hemos perdido dinero, pero la satisfacción de hacer algo inolvidable
realmente no tiene precio.
¿Cuál ha sido la respuesta de los medios de
comunicación especializados y el público en torno a Inmerso en la sangre?
Internacionalmente el álbum ha sido muy bien recibido, muy buenas críticas,
la gente que nos ha dado comentarios increíbles del álbum. Pero te soy honesto
siempre que hacemos un álbum pensamos en nosotros, más que en pensar si a la
gente le puede impactar.
Afiche promocional de concierto Total Death & Ibo Kush.
¿Por qué volver a publicar con American Line? ¿Qué
le ofrece este sello a la banda? ¿Existieron otras propuestas de sellos a nivel
internacional?
Siempre estamos conversando con varias labels en el mundo, sobre
trabajar juntos, pero el proyecto de “Inmerso en la sangre” era un trabajo que
platicamos con American Line desde su concepción, así que decidimos hacerlo con
él, además que esta vez coproducimos este álbum, entonces era conveniente,
porque teníamos el control de todo.
¿Por qué titular al álbum Inmerso en la sangre? ¿Qué significado oculta el soterramiento de
un elemento vital?
Es como un estado de dolor inmenso, si ya está ahogándote, eso que te
da vida, estás perdido…
Personalmente he atravesado por momentos muy difíciles esta última
época, y como siempre la banda ha sido un canal de expresión para estos
sentimientos, siempre es una gran terapia crear un poco de arte para desahogar
tus emociones.
Con Inmerso en
la sangre se refuerza la poética, por lo menos así lo entiendo, implícita
de la banda. Letras cargadas de dolor e ira, pero debidamente compuestas en un
cuerpo purulento. ¿Quién o quiénes fueron los encargados de escribirlas para
este álbum?
Yo escribo las letras de los álbumes de la banda desde siempre, no tengo
una formación en literatura, ni soy poeta, son líricas donde exteriorizar
sentimientos propios, vivencias o experiencias de personas cercanas son la base
de inspiración. He leído nuevamente mucho a Baudelaire estos tiempos.
Portada del libro Cicatrices del demonio, de próxima publicación.
El pasado es ese algo, transformado en recuerdos,
que duele. ¿Por qué sumarle a este dolor del ayer la sangre como elemento
purificador?
Como catalizador de emociones pienso yo, no es que soy la persona más
triste del mundo, de hecho, soy muy positivo y divertido, pero esa parte oscura
de la vida de las personas se puede trasladar a una melodía de canción o una
letra profunda que hable de lo que sientes.
¿A qué respondió el Split con Lasen?
Lasen siempre ha sido y siempre será una banda admirada por nosotros,
su trabajo es excelente y compartimos muchas cosas tanto musicalmente como en
nuestras vidas personales, fue la mejor decisión hacerlo juntos. Lasen está
lanzando un nuevo trabajo y nosotros estábamos en la etapa de promoción de
INMERSO, así que fue una gran oportunidad para ambos.
¿En qué otros proyectos se encuentra la banda? ¿Alguna
gira nacional en este 2016?
Tenemos varios shows puntuales en Ecuador, por ahí hemos empezado
conversaciones con varias personas del mundo sobre la manera de expandir
nuestra música a la gente.
Como te comenté CICATRICES DEL DEMONIO, es nuestra prioridad en estos
momentos, estamos en etapa de producción del diseño del libro, el CD ya ha sido
impreso en USA, la corrección de estilo está en proceso, muy pronto podrán
encontrar en librerías esta iniciativa.
Unas 150 personas se congregaron detrás de la Maternidad
Isidro Ayora, en el Centro de Arte Contemporáneo, antiguo Hospital Eugenio
Espejo, en la ciudad de Quito para presenciar uno de los festivales metaleros:
El Mitad del Mundo Fest, que en su inicio promocionaba a cuatro bandas, entre
ellas tres extranjeras y una ecuatoriana.
Rhapsody, banda que dirige el mítico Luca Turilli, y los
alemanes Primal Fear eran el plato fuerte para el domingo 11 de septiembre de
2016. Por otro lado, Valintor, de Colombia y Southen Cross, de Ecuador venían a
ser las bandas teloneras de este concierto “exclusivo” para 200 personas.
Un inicio tardío
Los domingos en Quito están acompañados de fútbol, la gente
se concentra en el resultado de sus equipos favoritos. Los otros, quizá están
en los parques, tal vez, en sus casas acompañados de unas buenas películas,
pero no para un grupo de jóvenes que se concentran en el antiguo Hospital
Eugenio Espejo para presenciar un concierto de Power Metal.
El concierto estaba previsto para las 15 horas. Un transporte
de turismo traía en su interior a dos históricas bandas de power metal europeo:
los italianos Rhapsody y los alemanes Primal Fear. La gente metalera se apostó
a los alrededores para saludar.
El primero en bajar fue Ralf Scheepers, vocalista de Primal
Fear, quien saludó.
- Ralf, welcome to Ecuador.
- Ralf, thanks for come here.
Eran los gritos que venían del público. Luego de unos minutos
apareció Luca Turilli, guitarrista y fundador de Rhapsody. Fue el momento
emotivo: “Loco, Luca está aquí”, “Grande Luca”, “Lione sin ti no es Rhapsody”.
A lo que Luca Turilli alzó sus brazos y saludó a la gente. Así, el concierto
parecía venir bien. Eran las 3 de la tarde y Quito era power metal.
Con la emoción de observar la llegada de las bandas al lugar
donde se daría el concierto, nos apostamos en la fila.
Los minutos iban pasando, la gente seguía llegando y las
puertas permanecían cerradas. Las cervezas y los cigarrillos se hacían presente
en el lugar, con esto se mitigaba la desesperación que producía la espera.
Comenzaron a llegar policías, unos 100 policías para unas 200
personas. Apareció el intendente, amenazando a la gente que si estaban con
aliento a licor no ingresarían al concierto; eran las 4 de la tarde.
Los metaleros que llegaron con puntualidad estaban
indignados, eran las 5 de la tarde, y las puertas permanecían cerradas. La
organización estaba en silencio, varias personas allegadas al local corrían con
papeles y detrás del intendente. Entre las personas, con su boleto a mano,
corría la voz que el concierto no tenía los permisos necesarios.
Las 17h10 minutos, la primera puerta se abrió. Todo hacía
premeditar que en pocos minutos, el concierto empezaría. Todo fue vana ilusión.
- Fue nuestra culpa. Ralf Scheepers decía desde los patios
del local.
- Mueve coshco, toca rápido.
- Ecuador no está preparado para los conciertos de Power
Metal.
- Si fuera Mago de Oz esto habría empezado rápido.
Mientras, los organizadores corrían de lugar en lugar sin
decir palabra alguna a los asistentes que se molestaban por el tiempo de
espera.
Todo esto transcurría y la gente comenzó a recordar los
grandes conciertos que se han dado en Ecuador, y la poca asistencia a estos.
También, recordaban anécdotas de las bandas, por ejemplo, de Ralf en Bilbao,
cuando gritó “Viva España” y el abucheo general por parte de los metaleros en
Bilbao, y Ralf sin saber qué sucedía. Anécdotas sucedían ya eran más de dos
horas de retraso.
Minutos más tarde, gente de la organización salió a dar
explicaciones: “En 15 minutos ingresamos, los Rhapsody dañaron los equipos y
para la no molestia de los presentes, las bandas teloneras no tocarán, sino
directamente pasaremos a los grupos europeos”. 6 pm. Ingresamos al local.
La rosa y la cruz.
Rhapsody y Luca Turilli en vivo
Ingresamos al local y el escenario estaba de luces y el intro
“Nova Genesis” nos decía que Rhapsody en pocos segundos haría su ingreso. De
fondo, Alessandro Conti daba inicio a uno de los shows emblemáticos en Ecuador,
su Knightrider of Domm, iniciaba con fuerza. Rosenkreuz sonaba en Quito. El
disco Prometheus le teníamos en vivo. Canciones como Symphonia Ignis Divinus,
el mismo Prometheus eran parte del escenario. Mientras el público batía palmas
a cada canción.
El instante en que la gente coreó fue con Land of inmortals,
aquella tierra de la inmortalidad en donde la eternidad se mira en un espejo.
Llegó el momento para el Ooooooooo… con Unholy WarCry: “In the dark lies
a secret” coreado por todos los asistentes. Así, con esa euforia del
público y la banda, llegaron temas emblemas como Son of pain.
Gran fuerza de estos italianos. Cabe resaltar, que Rhapsody
es la banda que, luego de separarse Luca Turilli formó con nuevos integrantes,
Dominique Leurquin, en la guitarra; Patrice Guers, en el bajo; y, Alex
Landenburg, en la batería. Hace no mucho tiempo, a Ecuador, en la Casa de la
Cultura, se presentó Rhapsody of fyre, la banda que quedó con Fabio Lione,
entre las dos bandas se comparten los discos Dawn of Victory, Legendary Tales,
entre otras.
La expectativa que se había creado era en verle en vivo a Luca Turilli, quien dio el alma en el escenario, jamás estuvo en quietud, siempre su guitarra dialogaba con el público que coreaba a viva voz cada una de las canciones de Rhapsody. La tremenda voz de Alessandro deliraba en el público. Los sonidos épicos no podían faltar, creaban un ambiente de guerra y aventura. Tolkien y su “señor de los anillos” se hacían presente.
Pero no podían faltar los “Game of trhones” con el solo de batería. Espacio para que la banda tome un respiro.
Los puntos catárticos de este show fueron Dawn of Victory y Esmerald Sword (canción con la que finalizó el show).
El pabellón tres del antiguo Hospital Eugenio Espejo a las 6:40 estallaba con el grito de “Gloria, /gloria perpetua/ In this dawn of victory”. 50 minutos duró el show de esta banda italiana.
El infierno sobre
ruedas: Primal Fear destruyó melenas en Quito
El tour rulebreaker, de los alemanes Primal Fear se hacía
presente, a las 19h10 minutos. Un intro, de unos 15 segundos daba inicio al
show, Final Embrace y los Primal Fear aparecían en escenario. Ralf Scheepers,
en la voz; Matt Sinner, en la guitarra, Alex Beyrodt, en la otra guitarra; Tom
Naumann, en el bajo, y Francesco Jovino, en la batería; Primal Fear era parte
de la escena metalera en Ecuador.
Canciones como In metal we trust hicieron que la gente
delirara. La canción rulebreaker sonaba en el escenario y Ralf Scheepers
emergía de los infiernos para desordenar lo “supuestamente” calmo. Los alemanes que rompen las reglas
hacían que la gente estalle en coro “He's a rulebreaker/ Hell on wheels/ And
it's not my last goodbye/ Rulebreaker/ Hell on wheels/ And there's no one left
to hide/ He's a rulebreaker/Born a rebel and born to die alone”.
Con los puños en alto, Ralf se emocionaba, y la gente gritaba
“Primal Fear/ Primal Fear”, ante esto, los alemanes atacaban con Angel in
Black, para esto, el virtuosismo de Alex Beyrodt generaba catarsis. Sign of
Fear, When death comes Knocking sonaban y la voz de Scheepers emitía los
típicos gritos heavys. Un eco permanecía en el local.
Luego de un juego de Ralf con los asistentes, empezó el destroce de melenas “Are you awake/ are you alive/ Are you ready for a fight/ gonna raise some hell tonight”. Angels of Mercy sonaba en el escenario del Antiguo Hospital Espejo. Seguido de la clásica The end is near.
El show de los alemanes duró aproximadamente una hora. Pero no podía faltar Metal is forever con la cual la gente vibró hasta el extremo. Unas 200 personas corearon el himno de Primal Fear.
Las 8:10 minutos, dio fin a uno de los grandes shows que se han dado en este 2016.
Rhapsody y Primal Fear dejaron el alma en el escenario. La gente se fue satisfecha, más allá de la pésima organización, shows como estos dan categoría a la escena metalera de Ecuador.
El
concierto anual de la Concha Acústica de la Villaflora, en Quito, es todo un
referente dentro de los espacios rock metaleros de los ecuatorianos. Un lugar
que ha visto nacer y posicionar a varias agrupaciones. Un espacio simbólico
para la representación del rock y metal nacional.
La
historia de este concierto la recoge el periodista Pablo Rodríguez en su libro Cuatro décadas de historia. Concha acústica,
trabajo donde hace un repaso cronológico del proceso de empoderamiento de este
espacio. Una obra clave para entender a un concierto, y a sus gestores.
A
propósito de este libro, contactamos a Pablo para conversar de su obra, y de
otros temas que la historia del rock y metal ecuatoriano, desde la mirada
crítica de sus representantes, mantiene fresca.
Rodríguez junto a José Luis Terán, creador de los medios metaleros Contaminación, Acero, Fuego Negro y Heavy Metal.
Saludos Pablo, ha pasado más de un año
desde la publicación del libro Cuatro décadas de historia. Concha acústica, ¿cuál
ha sido el nivel de aceptación que ha tenido entre los lectores interesados?
Consciente
de la realidad de consumo de libros en el medio, que registra bajos niveles de
ventas, se realizó un tiraje enfocado en el público objetivo, por lo cual este
está ya agotado. Luego de mi experiencia con Rocker Magazine, de la cual sus
últimos números registraron ventas a la baja, lo cual implicó pérdidas
económicas, hubiese sido una irresponsabilidad sacar altos tirajes que luego se
quedarían embodegados en algún lugar.
En un país con un limitante de distribución
del libro como producto cultural ¿Has logrado llegar a espacios geográficos
fuera de Quito?
Tomando
en cuenta que, por ejemplo, hay tiendas en la ciudad de Cuenca que hasta ahora
no liquidan viejas ediciones de Rocker Magazine, no hay una confianza en
establecer un circuito de ventas fuera de Quito, que es mi campo de acción, por
lo cual las ventas fuera de esta ciudad se realizaron únicamente bajo pedido.
¿Cuánto tiempo te tomó la investigación
y redacción final de la obra?
Algo
más de 3 años, pero sobre todo debido a varios periodos de para debido a otras
actividades relacionadas con la gestión cultural, ya que al no contar con un
presupuesto para investigación, fue imperante alternar esta con otras cosas.
Músicos, activistas culturales y organizadores relacionados al concierto anual de la Concha Acústica de la Villaflora en Quito.
¿Qué otra información no aparece en el
libro?
Solo
faltó espacio para poner más fotos. La obra es un relato basado en la
unificación de los diversos testimonios que se realizaron con la gran mayoría
de actores vinculados al proceso del festival. Unos cuantos, aduciendo
exclusividad, no quisieron contar su experiencia, pero al ser un hecho
protagonizado por muchas personas, permitió conocer todos los detalles
relacionados con este proceso, por ende quienes no participaron con sus
vivencias, igual son nombrados junto con la actividad que realizaron.
¿Cómo se logró la edición y publicación
del libro mediante el sello de la Casa de la Cultura ecuatoriana?
Con
muchos meses de gestión, altas dosis de paciencia y períodos de gestión que
obligaron a pasar días enteros en espera de contactar a las personas que
facilitan el proceso de impresión. Conocedor de que hay varios casos con
inmensos periodos en los que no se imprimen las obras, se tomó medidas
adecuadas a fin de poder lograr la publicación del libro. El Fondo Editorial Pedro Jorge Vera solo realizó la
impresión, ya que todo el proceso de diagramación lo trabajó Freddy Landazuri
en lo gráfico, Diego Brito hizo todo el diseño, y la edición de textos fue a
cargo de Ernesto Proaño y Landázuri también.
Rodríguez junto José Luis Jácome (músico y creador de la Fanzinoteca en Ambato) y Tania Navarrete, promotora cultural.
En el mes de abril retomaste,
tanto desde las redes sociales como desde artículos en la prensa ecuatoriana, un
tema indignante para los rockeros nacionales: la agresión del 96, cuando
militares retuvieron y agredieron a los asistentes a un concierto en la ciudad
de Ambato ¿Qué objetivo buscas con la exposición y análisis de esta
información? Y ¿Qué clase de repercusiones ha tenido tu artículo “La tarde de
las melenas caídas”?
Siento
que mucha gente cree que todo existe desde el aparecimiento de las redes
sociales o desde que empezó el gobierno del régimen actual, por ende esta actualidad de redes sociales y medios
alternativos está dejando en el olvido hechos claves que marcaron el desarrollo
de la escena rockera nacional.
Por
otro lado también vemos como varias libertades y derechos aún no se aplican del
todo y ese sesgo interpelativo al rock sigue latente en cosas como obligar a
despojarse de correas, labiales, peinillas, esferos y más cosas de uso personal
para ingresar a conciertos de rock –y solo de rock-, ubicando así en una suerte de criminales en potencia a
quienes asistimos a conciertos de este género.
Desconocer
hitos históricos que marcaron el proceso de la escena rock, es una forma de
pasar por alto elementos que hoy nos permitan entender las formas como ha
transcurrido nuestra escena, además de reconocer grupos que al ser parte de
esos hitos, hoy tiene un alto trabajo dentro del rock nacional, lo cual los convierte
en protagonistas y testigos de una historia intensa en un país que, a pesar de
no ser el epicentro de muchas cosas que ocurren en el rock latinoamericano,
tiene un proceso que marca una parte de la identidad musical ecuatoriana.
Las
repercusiones del artículo se miden en el debate que se armó en redes sociales
sobre la persistencia de algunas prácticas represoras, así como el papel
importante que tienen varias de las bandas que participaron en el hecho y que
se mantiene activas hasta la presente.
¿Ha cambiado la mirada prejuiciosa de la
policía y militares respecto a los rockeros ecuatorianos?
Prácticamente
en nada, esa visión normativa y prejuiciosa sigue presente.
¿El concierto anual en la Concha
acústica es un escenario para recriminar –desde cada una de las bandas
participantes- toda esta clase de atropellos contra los rockeros?
No
entiendo la intención de esta pregunta, porque vos no puedes ubicar a un solo
festival, de los muchos que hay, como un
generador de críticas al poder y la sociedad en general, ya que TODOS los
grupos que tocan en este festival, han tocado su mismo repertorio en TODOS los demás
festivales que hay a nivel nacional, además que este repertorio, si bien tiene
una alta dosis de crítica social, aborda también temas como el amor, la
diversión, el absurdo, la religión y más.
El
ser del rock es ese, criticar, tener una voz disidente, y eso se genera desde
todos los escenarios posibles, aunque mientras más grandes sean estos, más
posibilidades de llegar a más gente se dan, con lo cual el cometido del rock podría tener un efecto
más amplio.
Este
escenario ha generado otras cosas que van más allá de la crítica, como por
ejemplo la integración generacional labrada en todas estas décadas que el
festival está activo, ha sido un generador del uso del espacio público como medio
para expresar identidades culturales, y por ello se ha mantenido en todos estos
años.
Desde tu mirada de investigador y
periodista ¿Qué otros temas aún falta por dar a conocer a los lectores?
¿Trabajas en algún nuevo proyecto relacionado al rock ecuatoriano?
Pues
hay muchas cosas que contar, solo como ejemplos, la tendencia del metal extremo
que tendrá su prioridad en este año a juzgar por las producciones discográficas
que diversas bandas de este tipo están sacando, otro tema es las bandas que en
lo que van del año ya han salido a girar en el extranjero, entre otros.
En
cuanto a libros hay dos proyectos, uno se llama
Charlas de Rock, que consta de una serie de entrevistas a actores claves
de la escena nacional, y otro una revisión al proceso que ha seguido el metal
extremo en Quito.
Este
trabajo ep split agrupa a dos bandas ecuatorianas que han logrado imponer su
estilo dentro de un medio exigente, y donde solo sobresalen aquellas bandas que
han demostrado tomar al death metal no como mero género para figurar, sino como
parte integral de su vida.
Gritos
de dolor y devastación de The Grief y Devasted, dos bandas referentes dentro
del metal extremo nacional. Dos bandas para emprender y perdurar en un mosh
descontrolado. Dos bandas cuya obra habla de su nivel y puesta en escena.
Esta
obra, de libre descarga, es un tributo a ellos mismos, y la gira emprendida en
el 2015. Una tarea desgastante pero vital en el empoderamiento de toda banda de
metal.
Ocho
temas en directo que denotan la fuerza de cada una de las dos agrupaciones.
El
metal extremo en Ecuador continúa una senda sin perturbación. Una visión
desenfadada del entorno que apabulla y denota el despliegue de una agresividad
musical que tuerce cualquier intromisión de sensiblería.
Epidemia
pertenece a esta estirpe de bandas que han desarrollado una obra sólida en su
estructura musical, y salvaje desde su concepción de ver el espacio habitable. Metal
de muerte, para develar odios, posturas, y declaraciones contra un mundo
enfermo.
Por
ello Leprocomio (Satanath Records,
2016), como esa lectura reprochada de la sociedad, es un álbum que de principio
a fin logra un objetivo primordial: atrapar al oyente, volverlo parte del rito concebido.
Ocho
temas para total regocijo de los metaleros más extremos. Ocho temas para dejar
asentada la continuidad de una banda que ha sabido llegar lejos en su propósito
creador: Leprocomio es la certeza de
ello.
Scar Heavy es una joven banda
guayaquileña. Metal fresco que este 2016 ha empezado con la promoción de su
álbum debut Difícil Creer, un trabajo
con temas enfocados en lo social, donde la mirada y juicio crítico de banda
pesa sobre cada uno.
Contactamos a sus integrantes
para mantener un breve diálogo en torno a su trayectoria y a su trabajo
inaugural.
¿Cómo
les va con la promoción de su álbum debut?
Hasta el momento
vamos bien. Estamos indagando por muchos lados y creando contactos y nexos para
llamar la atención de la gente y que puedan conocer nuestro material.
¿Cuánto
les ha ayudado la promoción desde una productora con experiencia como
Brutalidad Total? ¿Qué otros sellos los respaldan?
Nos ha ayudado
mucho, desde promoción con afiches y promoción en la web, también nos respaldan
con buen asesoramiento en este ámbito. Y pues no trabajamos con ningún otro
sello, pues tenemos fe en el trabajo de nuestros amigos de BRUTALIDAD TOTAL,
aparte de las buenas referencias y la trayectoria que tienen es más que suficiente
para confiar en ellos.
¿A
qué ciudades han llegado con su propuesta?
Hemos ido a
Balsas provincia del Oro, a La Troncal provincia de Cañar, estuvimos en
Naranjal Provincia del Guayas, en el cantón Camilo Ponce Enríquez provincia del
Azuay.
¿Por
qué Difícil Creer? ¿Qué mensaje
habita más allá del título?
Le dimos ese
nombre mucho antes de comenzar a grabar el disco, porque cuando conformamos la
banda el propósito era llegar muy lejos y fue tanta la perseverancia y el
trabajo ensayando que en menos de lo que pensamos ya teníamos más de 10 temas
creados, incluyendo Difícil Creer que fue la primera canción que creamos.
Las
letras hablan desde un Guayaquil como urbe violenta, pero son también parte de
una realidad social que sucede en distintas partes de Ecuador ¿Quién o quiénes
son los responsables de escribirlas? ¿Qué elementos sirvieron de “inspiración”?
La verdad es que
las letras desde el principio fueron cogidos de un cuaderno de borrador de
Jorge –guitarrista- que tenía unas ideas locas, experiencias que le ha tocado
vivir, pero en sí no encajaba mucho a lo que queríamos expresar, entre todos
dimos ideas para acomodar las letras de cada canción, José –vocalista-
demostraba su talento en componer, aun así poníamos nuestras ideas para
acomodar la letra según lo que queríamos expresar y no solamente habla de un
Guayaquil violento sino de todo el mundo, lo que vive al día con tanta
injusticia y miseria, todo eso nos sirvió de inspiración para la composición de
las letras de cada canción.
¿Existe
algún tributo implícito hacia Kaos en el tema “Robaburros”, teniendo en cuenta
que ellos en los noventa ya hablaban de este particular grupo municipal?
Nosotros no
tomamos en cuenta si alguien ya hizo esto o lo otro, nosotros simplemente
sacamos esa rebeldía que muchos reprimen. Y no tenemos porqué hacer ningún
tributo a nadie.
Un
miembro clave de Scar Heavy –y esto sin estar ciertamente en la banda- es Larry
Flores, diseñador gráfico responsable del arte de portada y diseño en general
¿Logró captar, visualmente, la esencia de la banda en su totalidad?
Larry Flores es
un gran diseñador, profesional en lo que hace, lo demostró desde el primer día
que tuvimos una reunión con él para hablar sobre el diseño del cd, captó las
ideas de cada uno y los ilustraba en su cuaderno de dibujo, el diseño nos gustó
tal como nosotros queríamos demostrar a las personas lo que significaba el
contenido del disco.
¿En
qué trabaja actualmente la banda? ¿Seguirán sus próximas composiciones
enmarcadas en el reclamo social?
El 2016 está
enmarcado para darnos a conocer como banda nueva y con un material variado,
haremos lo posible por llegar a muchos lugares del país. El asunto de las
composiciones no es algo que tengamos previsto o planeado sobre hacia donde van
dirigidas las canciones, si tenemos que plasmar algún reclamo o alguna protesta
en una o varias canciones no dudaremos en hacerlo.
Fotos tomadas de la cuenta de facebook de la banda.
El
Festival Intercultural Alfaro Raymi, en su cuarta edición de 2016, desarrollado
en la ciudad de Portoviejo, presentó a catorce de las quince bandas
programadas.
Como
cabeza de cartel estuvieron los colombianos Witchtrap, quienes solo pudieron
presentar aproximadamente 20 minutos de repertorio.
El
espacio, para el desarrollo del concierto, fue el ex Aeropuerto Reales
Tamarindos de la ciudad de Portoviejo.
Un
sol intenso presente desde primeras horas de la mañana hasta avanzada la tarde,
no evitó que el público mosheara con las bandas por quienes había acudido.
Transcurrido
ya un mes del evento, contactamos a su organizador principal, Arnaldo Aguilar,
para dialogar respecto a los resultados del evento.
Nación Criminal de Colombia.
Arnaldo, después de un mes de
transcurrido el Alfaro Raymi, es más fácil hacer una evaluación del desarrollo
del festival ¿Cumplió la organización sus objetivos trazados?
Si
logramos cumplir todos nuestros objetivos, tanto en el marco del público como
en el cronograma de actividades dentro del Festival.
Una notoria presencia de metaleros de
varias ciudades del país se apreció en el concierto, por ello ¿Cuántos
asistentes participaron este año?
Alrededor
de unas 2500 personas se dieron cita en esta edición del Festival, entre
asistentes nacionales e incluso internacionales. Vino gente de Quito, Santo
Domingo, Otavalo, Durán, Manta, Loja, Cuenca, Guayaquil, Perú y Colombia.
¿Cuáles han sido las apreciaciones de
las bandas locales y nacionales respecto al desarrollo del concierto?
Todas
las bandas nos han felicitado por el desarrollo y la organización en general del
Alfaro Raymi, la logística del Festival fue muy buena, veníamos trabajando
varios meses antes para que todo saliera bien.
¿Qué imagen se llevaron las bandas
colombianas invitadas?
Nación
Criminal, Polikarpa y Sus Viciosas y Witchtrap se llevaron una buena imagen del
país, la gente aquí es muy hospitalaria, caritativa, especialmente porque
siempre nos hemos destacado por el buen trato a las bandas locales, nacionales
e internacionales, de ello pueden dar fe quienes han participado en el evento.
Ente de Quito.
Me llama la atención que desde las redes
sociales muchos asistentes se quejaban de que la policía haya interrumpido la
intervención de Witchtrap y no se haya apreciado a Eutanos, pero ¿Cuánta
culpabilidad tuvo el mismo público para esta decisión de la policía?
Así
es, las personas saben que dentro de Festivales hay ciertas restricciones, como
no consumir alcohol y eso se lo publicó en las redes sociales, pero no solo el público
es culpable, la Policía también es culpable porque fueron ellos los que dejaron
la puerta de acceso sin control, sin informar a la organización, entonces fue
ahí que el público aprovechó para poder consumir alcohol. A pesar de esto, la
gente disfrutó al máximo del evento, solo faltaba una banda -igual de
importante que las otras- por presentarse, la gente supo comprender que era
algo que se salía de nuestras manos ya que el Intendente de nuestra ciudad fue
quien clausuró el evento.
¿Cuántas facilidades ofrece el espacio
del concierto –antiguo aeropuerto- para un festival de esta naturaleza?
El
Ex Aeropuerto es un lugar muy amplio, donde se pueden realizar un sin número de
actividades, entre ellas Festivales y conciertos. Lastimosamente ese día pegó
muy duro el sol, la gente se refugiaba en las carpas que habíamos puesto, en
ese sentido el lugar no brindó las comodidades necesarias para el evento que
empezó desde la mañana, pero son pequeños detalles que ya hemos tomado en
cuenta para una próxima edición.
Witchtrap de Colombia.
¿Estuvo bien coordinado el control de la
policía dentro del mismo espacio del concierto?
El
tema de seguridad siempre estuvo coordinado con la Policía, porque sabíamos de
la magnitud del evento pero como te comentaba anteriormente, fueron ellos los
que dejaron la puerta de acceso sin control y sin informar a la organización,
tomando esto como base para clausurar el evento.
¿Qué errores encontraron en este
festival y qué mecanismos implementarán para su futura corrección?
Quizás
nuestro error fue confiar 100% el tema de la seguridad a la Policía Nacional,
sabemos que ante ellos no somos bien visto, en una futura edición contrataremos
seguridad privada que nos asegure un desarrollo del Festival Intercultural
Alfaro Raymi al 100% sin inconvenientes.
Finalmente ¿Habrá Alfaro Raymi para 2017?
Trabajamos
para eso, pero si les adelantamos que los entes auspiciantes están prestos a
ayudar. Esperamos seguir brindándole a las culturas urbanas un espacio de inclusión
y expresión en toda su variedad, a través de las artes o de la música,
brindándoles el espacio que se merecen ante la sociedad, como es nuestro
objetivo principal. Así mismo esperamos seguir contando con el apoyo de la
gente que gusta de asistir a estos eventos, lo cual también es una fuente de
turismo para nuestra ciudad.
Fotos tomadas de la página en facebook del evento.