miércoles, 16 de marzo de 2016

Una mirada a la urbe salvaje


El espacio urbano de constante conflictividad, de reiterativo abuso de autoridad, de una cotidianidad caótica y cada vez agresiva en sus distintas manifestaciones, es el escenario propicio para que exista el álbum Difícil Creer (Brutalidad Total, 2015) de Scar Heavy. Banda guayaquileña que ha comprimido su entorno violento, salvaje e inagotable, en la “inspiración” de sus temas.

Un trabajo acelerado en sus composiciones, cargado de riff pegajosos, de un doble bombo imparable, de un bajo furioso que retumba como telón de fondo y una voz que da cuenta de la desenfadada visión de un mundo, que resulta un mundo similar desde otros espacios.






Metal real, escrito desde la violencia común, desenmascarando una problemática social del día a día, donde la “autoridad” abusa de un poder no correspondido, renegando de los asesinos a sueldos incontenibles por la seguridad del país, sacudiendo a todas aquellas víctimas pasivas a reclamar sus derechos.


Difícil Creer se vuelve una radiografía mínima de una ciudad, y sin embargo sus diez canciones hablan tanto de ese Ecuador de injusticias, de presente perturbador, de un futuro utópico donde la paz resulta un anhelo urgente. 



lunes, 14 de marzo de 2016

Historias cargadas de ausencia

Portada del álbum.


La subjetividad con la que ha trabajado líricamente Total Death no ha sido una labor aislada. Existe una conexión en su obra, porque a toda ella la atraviesa un desencanto poético, donde lo lúgubre de las emociones se apodera de cada acción de su personaje que exclama.


Una voz única, la de la banda en sí, moviéndose en un territorio donde la emotividad supura muerte y desesperación. Una rutina que consume y envuelve, que acorrala y marca. Su música es una niebla para cubrir los rastros de la felicidad macabra.



Eso y mucho más se halla en Inmerso en la sangre (American Line, 2015) un álbum desesperante desde la mirada fatalista, desde el caos interno de sus personajes que pululan satisfechos de sus cicatrices.

Ocho temas para que el oyente se choque con historias cargadas de ausencia, de recuerdos, de un anhelo al silencio. Ha logrado, la banda, con este trabajo, la mixtura ideal donde agresividad y agonía confluyen en un mismo cauce.


Un tributo a la oscuridad. Una terapia de confrontación despiadada ante uno mismo.