Muerte al cordero

Si hay que reconocer a una banda persistente en reafirmarse, tanto en género como ideología; de entregarse odiante y compositivamente a cada una de sus creaciones; de restablecerse en su mundo caótico; de saberse representantes de un género; y sobre todo de entender que la paciencia otorga el grado preciso de madurez a todo arte, esa banda sin duda es Noctum.

Muerte al cordero (ep, 2010) merece muchos puntos a su favor, puesto que se evidencia y con hondura, la madurez de la banda, la fuerza compositiva y la ira interpretativa. Hay tintes ochenteros en sus temas: Muerte al cordero y El innombrable despliega sus alas, que enfatizan en este pagan black metal.

Subyace el mito, más allá de toda aversión anticristiana y cualquier apego satanista, porque lo que fluye es la manifestación colérica contra los sistemas opositores, que como lo sostuvo Legión hace años “atentan contra el libre vivir”.

Noctum, lo reafirmo, avanza y bien. Muerte al cordero es el mejor testimonio de que la banda ha enfocado acertadamente adónde llegar y esa meta oscura y pagana es el éxito (no entendido como lo comercial si no como lo imperecedero) de toda agrupación comprometida con el metal.